Seguramente ya has escuchado sobre los beneficios de la meditación, pero probablemente te encuentres con 2 situaciones: O no “tienes” tiempo o no sabes cómo!
Recordemos que la meditación se basa en 2 principios: la respiración y la mente en el presente; con la finalidad de que encuentres la calma, hagas contacto con tu alma y te ubiques en el presente, soltando tus pensamientos sin juzgarlos. Su práctica diaria te permite encontrar la paz interior, pero muchas veces nuestra vida tan llena de actividades nos dificulta encontrar esos momentos para meditar….
El día de hoy te voy a dar 3 prácticas para cambiar lo que haces todos los días y convertirlo en un acto de meditación!
- Báñate meditando: Qué momento más perfecto! Aquí puedes enfocarte en tu respiración y te voy a dar otro tip, mientras te bañas, ve agradeciendo cada una de las partes de tu cuerpo, dale gracias a tus piernas por permitirte caminar e ir a todos los lugares que te gustan, dale gracias a tu piel por permitirte sentir el aire, el agua, el calor y el frío, por permitirte sentirte viva, etc.
- Come meditando: Es probable que alguna de tus comidas en el día la hagas sola, aprovecha este momento para centrarte en tu respiración y concentra tu atención en el sabor de tus alimentos! ¿Te das cuenta? Estás en el presente! Ve saboreando cada bocado, siente la textura de los alimentos, su temperatura, mira sus colores, aprecia el olor de cada alimento!
- Da un paseo: ¿Te toca caminar hacia tu casa? ¿Tienes que ir a comparar algo? ¿Puedes salir a caminar? Perfecto! Utiliza este tiempo y camina meditando, recuerda tu respiración y pon tu atención ahí, fíjate cómo respiras mientras caminas, observa lo que hay a tu alrededor.
Puedes meditar en cualquier momento, en cualquier lugar y sólo necesitas respirar y estar en el presente, suelta tus pensamientos!